La maldición de la Lamia es una maldición como el que lanza la señora Ganush de "arrástrame al infierno" para vengarse de aquellas personas que se burlan de la clase social de los demás, es decir ricos que se burlan de los pobres y de los mendigos, es un ritual dirigido justo en el ego de aquellas personas que se creen superiores y que por ende creen que pueden humillar a los demás por su clase social, discriminando totalmente a su persona. Este ritual se encarga de ponerlos en un lugar incluso peor de las personas de las que se burlan y no es un ritual de muerte si no más bien un ritual donde humillamos totalmente su orgullo para que tengan que sentir en vida lo que es la ruina económica y la pobreza total, es una especie de cierre de caminos que inflinge castigo financiero. La Lamia es un demonio de muchos años que trabaja para los gitanos y los que tenemos descendencia gitana, puede lanzar maldiciones muy fuertes y las maldiciones gitanas en su defecto siempre son las más difíciles de quitar.